Recorrido corto (25 km. ida y vuelta) que nos lleva desde Olite hasta uno de los humedales más importantes de Navarra y del norte de la península, la Laguna de Pitillas. Todo el recorrido transcurre por caminos anchos, en buen estado, salvo un tramo de 500 metros por carretera secundaria con arcén. La primera mitad del recorrido, entre Olite y Beire, podemos disfrutar de un paisaje de viñas y huertos, junto al río Cidacos, muy agradable. En esta pequeña localidad hay fuente, merendero y bar. La segunda mitad, hasta llegar a la laguna, es un poco más monótona al tratarse de grandes parcelas de regadío.
Una vez llegamos a la Laguna de Pitillas, nos damos cuenta de la importancia naturalista que tiene este enclave. Lugar de nidificación de numerosas especies de aves, cuenta con varios senderos interpretativos y un observatorio (abierto los fines de semana). En función de la época del año cuenta con mayor o menor caudal de agua, pero siempre es un lugar que bulle de vida.
El único “enemigo” que nos podemos encontrar al hacer esta ruta es el viento, dado que por estas llanuras sopla con fuerza, sobre todo por las tardes y casi siempre cierzo, del norte. Una bicicleta eléctrica es ideal para hacerle frente, minimizando el esfuerzo.